Dígale a la policía, con mil disculpas, que no pudo evitar responder a una llamada urgente y nunca lo había hecho antes, si lo atrapan manipulando el teléfono móvilno es una buena idea porque los agentes, además de sentirse burlados, tendrán la sensación contraria de que es un vicio.
Con las excusas de la policía como tener el mamá en el hospitalcuando conduces sin prestar demasiada atención al velocímetro y no estás del todo seguro de no haber pasado el Limites de velocidad deben evitarse porque, además de no ser muy originales, se refieren a circunstancias fácilmente comprobables por los agentes.
Si se quiere ocultar la evidencia, real o supuesta, de haber bebido unas copas, no es el caso salir con afirmaciones sobre tu poca tolerancia a alcohólico o similares, porque sólo servirán para convencer a los policías de la necesidad de la temida, como infalible, prueba del alcoholímetro .
Entre las excusas que ya conoce la policía está la de haber cambiado de monedero o billetera y olvidarse de trasladar el licencia y los otros documentos lo que, además de ser inútil, no habla a favor de la fiabilidad del conductor que se encontró sin él.
Para alegar el riesgo de tarde para el trabajo para eludir los controles habituales no servirá para evitar una multa, en su caso, porque sólo despertará en los propios policías, trabajadores, además de una comprensible irritación, la obvia consideración de que para ser puntual es necesario moverse con una cierto avance.